Si alguna vez ha cocinado con una sartén antiadherente recubierta de teflón, probablemente habrá visto cómo los ingredientes húmedos se deslizan fácilmente por ella. Esto sucede porque el componente clave del teflón es el flúor, un elemento ligero que es naturalmente repelente del agua, o hidrofóbico. El teflón también puede utilizarse para revestir tuberías y mejorar el flujo de agua. Este comportamiento llamó la atención del profesor asociado Yoshimitsu Itoh, del Departamento de Química y Biotecnología de la Universidad de Tokio, y de su equipo. Les inspiró a explorar cómo las tuberías o canales hechos de flúor podrían funcionar a una escala muy diferente, la nanoescala.(…)